SEXO O INTIMIDAD: ¿CONOCES LA DIFERENCIA?

El sexo y la intimidad forman parte de una relación saludable. Pero puede haber sexo sin intimidad, intimidad sin sexo, sexo sin relación, y relación sin sexo. Veamos cómo es esto.

Primeramente el sexo es una necesidad bilógica. "Los animales saludables necesitan sexo", decía un buen amigo. El sexo es un acto de gratificación física, de disfrutar de una buena experiencia sexual y orgasmo, solo o con otra persona. Ciertamente existen personas asexuales, a quienes el sexo ni les viene ni les va. Pero la mayoría de las personas tienen necesidades sexuales. Estamos claros en que una relación no es solo sexo, pero cuando decidiste escoger a esa personas particular entre muchas otras, fue porque algo te llamo la atención de ella. O fue su físico, o su inteligencia, o su ternura, o quién sabe qué; pero despertó curiosidad y deseo en ti. Por esto la separaste de las otras y trabajaste, o te trabajaron, para establecer una relación más personal porque algo te atrajo.

Es posible que en algún momento hayan tenido sexo. La probabilidad es que si el sexo no funcionó, pudieron continuar como buenos amigos, o simplemente dejaron de verse. Pero si la experiencia sexual fue agradable, con toda probabilidad continuaron compartiendo. Así que el sexo fue probablemente la "pega" que los unió.

Ahora bien, una vez existe la atracción comienza a desarrollarse lo que es la intimidad. La intimidad comienza por conocer y dejarse conocer. Para que exista intimidad debes atreverte a mostrarte como eres, al igual la otra persona. Poco a poco se va conociendo esta persona, sus gustos, sus opiniones, lo que siente; se comienza a conocer quién es realmente. Es importante aclarar que en este proceso uno se hace vulnerable, siempre que nos mostramos como somos nos vulneramos. Si la otra persona aprecia, respeta y valora nuestra disponibilidad a vulnerarnos, vamos bien. En ese proceso puede que nos guste más, o que nos guste menos. Existe la probabilidad de que el sexo sea muy bueno, pero la persona en si no nos caiga tan bien. Pero eso no tiene que ser un problema. Si el sexo es bueno pero la persona no nos agrada, está la categoría de "amigx con privilegios". De esta manera puedes tomar lo que te agrada, en este caso el sexo, y no tienes que tolerarla el resto del tiempo. Aclaramos, para que no hayan malos entendidos, nadie usa a nadie, la gente se deja usar, o se usan mutuamente.

Pero si el sexo es bueno, y sobre eso nos cae bien, comienza la intimidad real. Hemos comenzado a dejarnos conocer por esta persona, y hemos estado conociéndola. Nos sentimos comodxs cerca de ella, la preferimos para compartir entre otras, se disfruta mutuamente de esta compañía, la pasamos bien juntos, en ocasiones puede que hasta lleguemos a sentir y pensar de forma parecida. La intimidad es sobre sensaciones que pueden incluir aspectos físicos pero tambien emocionales, intelectuales, y para algunas personas, hasta espirituales.

Revisemos lo que hemos dialogado hasta este punto: el sexo es animal, puro instinto. Se orienta a bajar una tensión que se acumula cuando no se tiene por largo tiempo, se busca eyacular, llegar al orgasmo, bajar la tensión. La intimidad complementa, enriquece el sexo. La intimidad es compartir, es rozarse, explorarse, tocarse; y no siempre tiene que finalizar en penetración o eyaculación. Ambas son necesarias para una buena relación. Pero la relación que se cimenta sobre solo sexo, puede ser más pasajera porque el sexo animal no siempre se fija en un solo sujeto. Si es solo sexo, un sujeto puede parecer atractivo este mes, pero el próximo mes se busca nueva estimulación.

Ahora bien, se puede tener sexo sin intimidad, e intimidad sin sexo, y ambas pueden ser muy gratificantes. Se puede tener una relación satisfactoria de buen sexo e intimidad y un día en particular se decide tener puro sexo, sexo animal. Ese día, o noche, se alimenta la bestia interior y se satisface el instinto, y puede ser muy saludable para la relación. De igual manera se puede decidir que este día, o noche, lo que necesitamos es tocar y ser tocado, besar, rozar, sentir la cercanía de ese otro cuerpo de esta persona que nos resulta tan especial.

Como hemos visto no hay nada escrito sobre que puede ser mejor. Depende de las necesidades muy particulares de cada cual. Hay personas que pueden tener mucho sexo y sentirse vacías porque no han logrado intimidad, y las hay que pueden vivir muy felices sin intimidad y solo con sexo. Pero vale saber la diferencia, y conocerse mejor para saber que realmente necesitamos.

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